Did you know that the Incas’ road system surpassed the Roman roads?
El Camino del inca (en quechua, Qhapaq Ñan o Inkanaani) fue un sistema de caminos de enormes distancias en la civilización incaica que iba desde Quito hasta la Argentina. Todos estos caminos se encontraban conectados al Cusco, la capital del Tahuantinsuyo o Imperio incaico y facilitaban su comunicación entre los pueblos conquistados y, al mismo tiempo, constituían un efectivo medio de integración político–administrativa, socioeconómica y cultural de todo el imperio.
Fue además un símbolo del poder imperial incaico y de su expansión a lo largo de la geografía sudamericana que incluyó Bolivia, Chile, Ecuador, Perú y el norte de Argentina. Dado que el Qhapaq Ñan interconectaba localidades tan distantes como Quito, Cusco y Tucumán, los conquistadores españoles lo emplearon durante el siglo XVI para invadir Perú, Bolivia, Chile y las pampas argentinas.
Con un total de aproximadamente 60 000 kilómetros de longitud esta columna vertebral hábilmente construida por manos de especialistas incas (sin el uso de la rueda ni caballos) fue mucho más extensa que las famosas calzadas del imperio romano (Roman roads) y puede ser comparada, por sus dimensiones, con la Ruta de la Seda o la Gran Muralla China.