The popular Spanish saying “Zapatero, a tus zapatos” is the perfect way to remind people to mind their own business and stick to what they know.
Este refrán nos recuerda que cada persona debería opinar sobre lo que conoce y dedicarse a su profesión u oficio y evitar meterse en asuntos que no les concierne. Por ejemplo, un zapatero es un experto en hacer zapatos y tiene muchos conocimientos sobre este tema, pero esto no significa que sea un experto en áreas como marketing o temas diferentes como política, medicina, etc.
Se dice que esta frase tiene origen en la Antigua Grecia en el siglo IV a. C.. En esta época había un famoso pintor llamado Apele que un día corrigió una de sus pinturas después de escuchar la crítica de un zapatero sobre las sandalias que había dibujado en uno de sus cuadros. Cuando el zapatero notó que Apele escuchó sus comentarios, comenzó a darle sus opiniones sobre otros aspectos de la pintura. Esta actitud molestó al artista quien le dijo que se ocupara de lo que entendía: los zapatos.