El refrán “Contra la muerte no hay ley, mata al Papa, mata al rey” ha caído un poco en desuso, pero aún tiene un mensaje importante.
Esta frase nos recuerda que no importa quiénes somos o cuál es nuestra posición en la vida, la muerte no discrimina.
En inglés no hay una equivalente idiomático exacto, pero frases como “death doesn’t discriminate” expresan una idea similar.